RESEÑA #96 | Un perro

*Lo he leído en catalán.

➤ AUTOR: Alejandro Palomas

➤ EDITORIAL: Destino

➤ AÑO: 2016

➤ PÁGINAS: 336

➤ GÉNERO: Narrativa

Este libro llevaba un año en mi estantería cuando lo leí, y es que me apetecía probar al autor pero a la vez siempre había un libro por delante de este y al final nunca era mi prioridad, pero al final un día me planté delante de la estantería y lo cogí. Como he dicho, es mi primera toma de contacto con el autor, y sin duda alguna repetiré pronto.

«No es extraño que nos cueste tanto perdonar, perdonar de verdad, cuando nos es tan difícil decir con palabras qué nos hace daño de verdad.»

Sabía que este libro tenía como eje un perro, pero creía que lo enfocaría de una manera completamente distinta, aunque no por ello me ha gustado menos de lo que esperaba: al contrario. Un perro es un libro que no tiene una trama en sí, sino que es de mi tipo de novelas favoritas: es una novela de personajes, y vaya personajes... pero de eso toca hablar después.

Es una novela que me ha transmitido mucho en muy poco, que me ha hecho sentir cómoda entre sus páginas y me ha atrapado. Es de esos libros con los que te dejas llevar, que no te atrapan ni te enganchan pero que te hacen sentir como en casa cuando los lees, y esos justamente son mis favoritos. Es una pena haber esperado un mes a escribir la reseña porque no os puedo hablar con la emoción en caliente, pero sí puedo recordarla y he de deciros que lo pasé bien y lo pasé mal con ella.

Digamos que es una novela más que dura, cruda. Cruda porque te muestra el mundo, la vida en desnudo. Estamos rodeados de películas y libros que idealizan la vida, en los que los personajes no paran de vivir sucesos extraordinarios y su vida está repleta de éxitos, objetivos y siempre se sienten llenos. En Un perro no, esta novela te muestra la vida de personajes reales que podrían ser tú o yo o nuestro vecino, personajes que no tienen nada de extraordinario, personajes que a veces se sienten vacíos, se preguntan qué han conseguido en la vida y a veces no saben ni cuáles son sus objetivos. Yo, personalmente, me he visto más reflejada en ellos que en los personajes idealizados de otras muchas novelas.

«No te atreves a comprometerte, amor mío. Tienes demasiado miedo de querer, de querer y que no dure, de que se vayan pronto. En eso casi todo el mundo se parece.»

Los personajes, como ya os he dicho, son los pilares de esta novela y es por ello que si me ha gustado también me han gustado ellos, su construcción. Me ha parecido curioso que apenas apareciesen descripciones físicas, ha sido como si al autor solo le interesase que viésemos la psicología de estos personajes, y eso me ha gustado. Por ejemplo, no llegamos a saber la edad de Fer, el protagonista, hasta pasada la primera mitad de la historia, y tampoco se le da un trato distinto por ser homosexual, no se hace mención a ello apenas y no se montan dramas: trata su sexualidad como trataríamos la heterosexualidad, como algo totalmente corriente (como debería ser), y eso me ha encantado. 

Las hermanas de Fer y su madre, Amàlia (sobre todo esta última), son los personajes principales y los que une R, el perro de Fer. Todos tienen problemas y son complejos, pero sin duda alguna la que me ha parecido más compleja es Amàlia. Amàlia es una mujer mayor muy compleja, un personaje que lo mismo te despierta ternura como te parece insoportable y desquiciante dos páginas después. Sinceramente, en ningún momento he logrado comprenderla ni adelantarme a sus acciones porque me parecía imprevisible, he sido incapaz de conectar con ella, pero sin duda me ha gustado mucho poder leerla.

Y, finalmente, me gustaría hablaros de otros dos aspectos que me han encantado de Un perro. En primer lugar, la pluma del autor me ha parecido sublime: sencilla y muy cercana al lector, transmitiéndote justo lo que te quiere transmitir, es por ello que voy a seguir leyendo a Palomas sin ninguna duda. En segundo lugar, el amor por los perros, por los animales es palpable en cada página y la relación de Fer con R, su perro, me ha parecido preciosa. Siempre me han gustado los animales y tengo una perra, por lo que ha logrado conectar muchísimo conmigo en este sentido (y en todos).

«A veces solo vemos lo que nos falta, no lo que nos acompaña.»

En conclusión, no puedo hacer más que animaros a que le deis una oportunidad, sobre todo si os gustan las novelas de personajes y amáis los animales, os aseguro que no os vais a arrepentir. Por mi parte está claro que después de lo que he conectado con este libro y lo que me ha gustado la pluma del autor, el año que viene voy a leer sin falta el otro libro suyo que tengo en la estantería.

PUNTUACIÓN:

¡Nos leemos y feliz Navidad!